Excursiones responsables con la naturaleza

A todos nos ha pasado que, durante una excursión en medio de la naturaleza, rodeado de cosas asombrosas, te encuentras con algo que llama demasiado tu atención y sientes deseos de tocarlo o, al menos, acercarte lo más posible. Incluso es probable que hayas pensado en llevártelo como recuerdo u obsequio.

Sin embargo, ese impulso tan usual en algunas personas -y comprensible, por cierto- no es lo más adecuado, si queremos cuidar el ambiente natural que estamos explorando y descubriendo.

Puede parecer una exageración, pero debemos ser conscientes de lo frágiles que son algunos ecosistemas y que un pequeño acto para nosotros, puede poner en riesgo la vida silvestre de un lugar, sobre todo en zonas que normalmente no reciben visitantes. Es parte del turismo responsable.

Respetar los límites de los senderos suele ser la primera instrucción que recibimos antes de comenzar una caminata. La importancia de esta norma se relaciona con el peligro de, por ejemplo, pisar un nido, una madriguera o, incluso, diminutos organismos que, aunque no seamos capaces de verlos, son fundamentales para el desarrollo de otras especies. En ese sentido, también debemos tener cuidado al tomarnos de troncos y ramas al desplazarnos.

Por supuesto, no dejar basura en el camino es una regla esencial y siempre es importante recordarlo: Todo lo que llevemos a una excursión debe regresar con nosotros. Por eso, lo recomendable es tener un espacio para esto en la mochila y cuidarnos del viento cuando saquemos algo para comer.

La suerte de encontrarnos con un animal salvaje es, sin duda, una de las partes más emocionantes de una excursión. Lo más recomendable en estos casos es mantener una distancia prudente y un respetuoso silencio. Haciendo esto, además de estar a salvo, nos aseguramos de no alterar al animal. Lo mejor es contemplar y aprovechar la oportunidad de ver cómo se comportan distintas especies en su hábitat natural.

Te invitamos a seguir estas simples, pero importantes reglas de conducta. Realizando una excursión responsable disfrutarás de la naturaleza de una forma mucho más consciente, sabiendo que tu paso por el bosque, la montaña, la playa o el desierto, causó el mínimo impacto posible al medio ambiente.